Aguas de Calpe, empresa encargada del suministro y abastecimiento de agua, ha aprobado una serie de medidas excepcionales ante la situación de alarma generada por el COVID-19, la primer de ellas es que se prolonga el periodo de pago para aquellas personas que no pueden hacer frente a los recibos dentro del periodo de pago voluntario sin generar ningún tipo de recargo.
Además se adaptarán con carácter extraordinario los niveles de ayuda social del actual programa de Responsabilidad Social Humanitaria de Aguas de Calpe para impedir que los efectos derivados del estado de alarma puedan poner en riesgo de exclusión social a cualquier ciudadano de Calp.
El concejal y consejero delegado de Aguas de Calpe, Juan Manuel del Pino, ha señalado que “la empresa en coordinación con los Servicios Sociales ha adoptado estas medidas para mantener un servicio esencial como es el agua. Aguas de Calpe ha establecido un Plan de Contingencia que se mantendrá en vigor mientras el Gobierno de España mantenga el estado de alarma, cuya finalidad es evitar el riesgo de exclusión social entre los usuarios más desfavorecidos. Para ello se prolongará el periodo de pago mientras exista la necesidad sin que ello comporte sanción ni sobrecargo alguno”.
Además Aguas de Calpe garantiza la calidad y el suministro del agua para consumo así como el tratamiento y saneamiento de las aguas residuales en el municipio.