Martes, 15 Enero, 2019 - 11:30

Por primera vez el yacimiento arqueológico de los Baños de la Reina es objeto de trabajos de mantenimiento y conservación más allá de las actuaciones de los sucesivos Campos de Trabajo del IVAJ o de los voluntarios de Amicitia. Y es que hace unos días empezaron los trabajos de limpieza conservación y mantenimiento en la zona a cargo de la mercantil Alebus Patrimonio Histórico. Hasta ahora las actuaciones se han centrado en el desbroce de la zona.


El Ayuntamiento adjudicó a esta empresa, por 14. 989€ y un periodo de cuatro meses prorrogables, el contrato para los trabajos de mantenimiento y conservación del yacimiento arqueológico de Baños de la Reina y sus zonas de influencia (acceso y vallado). Se trata de los trabajos de conservación y limpieza, de mantenimiento de sendas y acceso, recogida de desperdicios, etc., de forma que se consoliden los trabajos realizados en las diversas campañas de los Campos de Trabajo.


Los trabajos seguirán las instrucciones del Plan Básico de Actuación redactado al efecto y de la arqueóloga técnica y directora del yacimiento, Alicia Luján, que ha señalado que “el yacimiento necesita una serie de trabajos de mantenimiento y esta actuación es el pistoletazo de salida, además con el respaldo de tener por fin el decreto que confirma su declaración de BIC, ello nos obliga a trabajar para mantener el yacimiento en las mejores condiciones y hacerlo accesible a los visitantes “.


El representante de la empresa, Eduardo López Seguí, explicó que “inicialmente realizaremos un sistema de fichas y se le dará personalidad a cada elemento, evaluando su estado inicial y final para que a largo plazo se puedan analizar las necesidades , esto autoregulará el proceso de trabajo en cada elemento, se trata de conservar, mantener y optimizar, actuar en aquellos elementos que dotan de entidad a este yacimiento, por ejemplo el mosaico central que será objetivo prioritario”.


El yacimiento arqueológico de Baños de la Reina, declarado recientemente como BIC, cuenta con una extensión de unos 10.000 metros cuadrados, unos 600 metros lineales de vallado perimetral y un recorrido peatonal de visita de 200 metros lineales. Su valor e importancia arqueológica y la necesidad de seguir investigando en él conllevan la necesidad de mantener la limpieza y conservación adecuada de la zona.