El Ayuntamiento de Calp ha renovado el tratamiento de la procesionaria que se realiza anualmente en el mes de noviembre y se repite en febrero como refuerzo.
Aunque no se tienen evidencias que demuestren que la presencia de procesionaria vaya a ser mayor que otros años desde el Departamento de Medio Ambiente se recomienda precaución en las zonas de pinadas. Esta recomendación se debe extremar en el caso de menores y perros evitando en todo momento su contacto con la oruga.
La procesionaria forma parte del ecosistema mediterráneo y en ningún caso constituye una plaga aunque pude generar problemas al interactuar con personas y animales. Es importante conocer el ciclo biológico de esta larva ya que cuando están en fase de maduración descienden del pino para enterrarse en el suelo y crisalidar, proceso por el cual se transformará en mariposa. Ese descenso del árbol y hacerlo en fila es lo que hace que se conozca con el nombre de procesionaria. En la zona del arco mediterráneo este proceso suele darse durante los meses de febrero y marzo.